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¿Qué significa estar presente con tus hijos?
Ya me habrás oído hablar del tema de cantidad vs. calidad y de como lo de estar presente físicamente en la misma habitación o en el mismo espacio con tu hijo o hija no significa estar de verdad PRESENTE.
Ya me habrás oído hablar del tema de cantidad vs. calidad y de como lo de estar presente físicamente en la misma habitación o en el mismo espacio con tu hijo o hija no significa estar de verdad PRESENTE.
¿Prefieres escucharlo? ¡Escúchalo aquí!
Entonces ¿qué significa estar presente con nuestros hijos? Esto es algo que a menudo me preguntan las mamás con las que trabajo en mis sesiones de coaching y en mis cursos online. Y, claro no te sorprenderá si te digo que el mindfulness como técnica de enfoque de atención, ayuda muchísimo.
Hoy te quiero dar 4 claves que desarrollan Dan Siegel y Tina Payne Bryson, dos psicólogos americanos de renombre, en su libro “El poder de la presencia: Cómo la presencia de los padres moldea el cerebro de los hijos y configura las personas que llegarán a ser”. Aunque este libro no está escrito específicamente para niños neurodiversos, después de leerlo, me ha inspirado a darte alguna claves que sí se pueden aplicar en nuestras circunstancias de ser padres de hijos con autismo, con TDAH, con dislexia, dispraxia, síndrome de Down, y otras neurodiferencias.
En la versión inglesa, los autores hablan del poder de “showing up”, que es una expresión que me encanta y que se queda pobre al traducirse meramente por presencia. To show up es aparecer en escena, estar ahí, dar el do de pecho, poner la carne en el asador… En fin, entrarle de lleno a la maternidad y paternidad. De lleno. No es solo aparecer en escena, es aparecer en escena, estar pendiente y conectar profundamente con nuestros hijos.
Entonces, ¿cómo lo hacemos?
No se trata de perfección, sino de predictibilidad. Esto me parece importantísimo porque a menudo lo que entra en escena es la culpabilidad, y sin razón. Los autores hablan de cómo está estimado que solo necesitamos dar en la diana a nivel de entender y atender a las necesidades de nuestros hijos un 30% de la veces. UN 30%! Lo repito: un 30% Con eso ya creamos predictibilidad. De cualquier manera, y más allá de los números, la clave es entender que no tenemos que estar ahí al pie del cañón (madre mía, la cantidad de metáforas que me están saliendo en este episodio!). No tenemos que estar al pie del cañón con nuestros hijos el 100% de nuestro tiempo. Ni aunque tengan necesidades específicas (en el caso de niños que se auto-lesionan, hay que investigar a fondo para conseguir poner en marcha medidas paliativas y preventivas para no tener que estar permanentemente pendientes de ellos, porque eso lleva a cuadros de ansiedad clínica).
Se trata de consistencia. En la maternidad es más beneficioso el cuidado consistente que un cuidado errático, aunque venga puntuado de momentos preciosos. Los hijos necesitan predictibilidad, sobre todo antes las potenciales adversidades que pueda suponer tener una diferencia de desarrollo o de aprendizaje.
Así que, que estés tú y su madre/padre ahí de manera consistente para:
1. Ayudar a tu hijo a sentirse SEGURO
2. Ayudar a tu hijo a sentirse VISTO
3. Ayudar a tu hijo a sentirse CONSOLADO
4. Ayudar a tu hijo a sentirse A SALVO
Antes de entrar a hablar de cada una, te voy a dar la versión resumida de la llamada teoría del apego. El apego es el vínculo emocional que desarrolla el niño con sus padres (o cuidadores) y que le proporciona la seguridad emocional indispensable para un buen desarrollo de la personalidad.
La tesis fundamental de la Teoría del Apego es que el estado de seguridad, ansiedad o temor de un niño es determinado en gran medida por la accesibilidad y capacidad de respuesta de su principal figura de afecto (persona con que se establece el vínculo). Hace varias décadas se llevaron a cabo una serie de estudios en los que la madre entra y sale varias veces de una habitación, dejando a su hijo unas veces solo y otras en compañía de un desconocido. Las separaciones son muy breves.
El equipo investigador grabó y analizó la conducta del niño cuando se produjeron las separaciones y, sobre todo, lo que pasa en el reencuentro. El reencuentro es el indicador más claro del estado de una relación. Se llego a 4 tipos de apego:
El tipo de apego seguro se caracteriza porque el pequeño busca la protección y la seguridad de la madre y recibe cuidado constante. “Un niño con apego seguro juega con los juguetes, se aflige cuando la madre abandona la habitación, interrumpe el juego y, de algún modo, demanda el reencuentro. Cuando la madre vuelve, se consuela con facilidad, se queda tranquilo y vuelve a jugar”
El tipo de apego evitativo se caracteriza porque el pequeño se cría en un entorno en el que el cuidador más cercano deja de atender constantemente a las necesidades de protección de éste. Esto es contraproducente para el desarrollo del pequeño, puesto que no le ayuda a adquirir el sentimiento de confianza hacia sí mismo que necesitará posteriormente en su vida. Por tanto, los niños (y también de adultos cuando ya han crecido) se sienten inseguros y desplazados por las experiencias abandono en el pasado. evitaban tener proximidad cercana con la madre y no lloraban ni mostraban signos abiertos de disgusto cuando ella abandonaba la habitación. Cuando la madre volvía, estos niños evitaban de forma activa el contacto con ella...
El tipo de apego ambivalente se caracteriza porque estos individuos responden a la separación con gran angustia y suelen mezclar sus conductas de apego con protestas y enfados constantes. Esto se debe a que no han desarrollado correctamente las habilidades emocionales necesarias, ni han tenido expectativas de confianza ni de acceso a los cuidadores. reaccionaba fuertemente a la separación. Cuando la madre regresa, estos niños buscan el reencuentro y el consuelo pero pueden también mostrar rabia o pasividad: no se calman con facilidad, tienden a llorar de una manera desconsolada y no retoman la actividad de exploración.
El tipo de apego desorganizado Estos niños reaccionan ante el encuentro con sus madres de una forma confusa y desorganizada. Se encontraron indicios de que los padres de estos niños asustaban a sus hijos mediante abusos u otras formas de maltrato.
Ahora, ¿para qué nos sirve este tema de la teoría del apego? Para entender, primera y principalmente, TU PROPIA HISTORIA DE APEGO cuando tú eras niño o niña.
Aunque tú no hayas tenido un apego seguro de tus padres, mientras hayas reflexionado y hecho las paces con la narrativa, con la historia de tu niñez, le puedes dar una presencia sólida a tu hijo.
Se puede aprender nuevas pautas de comportamiento y practicar con tus propios hijos
¿Quién es responsable ahora? Tú
Se puede re-cablear el cerebro
Y se pueden romper cadenas del pasado para no darlas en herencia a nuestros hijos
Las 4 características de la presencia con nuestros hijos.
1. Ayudar a tu hijo a sentirse SEGURO
Como madre tienes dos responsabilidades: proteger y evitar ser la fuente de miedo para nuestros hijos. Aunque esto último pueda parecer una locura, piensa que cuando te enfadas y gritas o cuando estás triste y lloras desconsoladamente, puedes causar temor en tus hijos. No se trata de evitar mostrar tus emociones, sino de gestionar mejor cómo las expresas y como las explicas para que tus hijos no sientan que ellos son los culpables.
Cuando hablo de la seguridad de nuestros hijos, no me refiero a la sobreprotección que tanto se da con los hijos diferentes (por cierto, si aún no has escuchado el episodio 34 con Raquel Parra Valls no te lo pierdas). Me refiero a apoyarles en sus luchas entendiendo las situaciones y las capacidades del niño.
Estrategias:
a. Nuestra propia gestión emocional
B. reparar cuando no lo hacemos bien
C. Crear un ambiente en el hogar de puerto seguro de bienestar para que tus hijos puedan volver a ti por apoyo, aunque no siempre lo expresen de manera verbal o clara (pero lo demostrarán con sus emociones y con su cuerpo).
Siempre es muy potente reflexionar sobre tu propia experiencia al crecer. Cómo te sentías seguro? Y cuando no?
2. Ayudar a tu hijo a sentirse VISTO y valorado
Enfocarse en entender y responder a la intención y necesidad detrás del comportamiento.
Es especialmente difícil con los hijos diferentes: observar, aceptar, no juzgar sino entender todo tipo de factores, evitar etiquetas, no negar o suprimir emociones de los hijos, no avergonzar, minimizar o echar la culpa.
Estrategias:
a. Tener curiosidad por profundizar para entender a tu hijo, no asumas, no te pongas en lo peor. Pregúntate por qué. No asumas que no quiere, entiende que tal vez no lo puede evitar.
b. Intenta entrar en su mundo, de la manera que sea.
Reflexiona sobre tu propia experiencia, si tus padres te valoraron y entendieron, porque esto puede tener un efecto sobre como te valoras y te ves a ti mismo y a tu capacidad para hacerlo con tu hijo.
No se trata de ser perfecto, de estar siempre ahi, de verlo y entenderlo todo. ¿Que puedes hacer desde ya para entender a tu hijo? Crear espacios para compartir, enfocarte en el por que cuando hay comportamientos que no te gustan y demostrando interés por algo que les gusta a ellos.
3. Ayudar a tu hijo a sentirse CONSOLADO / SOSTENIDO
Cuando nuestros hijos se frustran o tienen sentimientos difíciles no intentar controlar o manipular sino tranquilizar para aumentar su propia capacidad interna de gestionarse.
Sostener ayuda a desarrollar ciertas funciones neurológicas complejas - decisiones, planificación, regulación emocional, empatia, autoconocimiento, etc,. Se trata aqui de co-regulacion emocional con nuestros hijos. Se trata de ayudarles a adquirir habilidades y no solo a controlar sus comportamientos según el momento.
Se pueden poner limites y reglas fijas sobre comportamientos y expectativas mientras que se es “blando” o suave con el niño y sus emociones. Conectar para reconducir. ¡La conexión es lo primero!
Estrategias:
a. Ayudarle a usar su propio sistema interno para auto-tranquilizarse: crea una cueva o rincón sensorial, pon música tranquila, invitale a ciertos movimientos o a que se mueva, o estableced juntos una “llamada de alarma”.
b. Presta atención a tu respuesta no-verbal. Ponte a su nivel de ojos (o por debajo). Afecto. Presencia. Empatía.
Reflexiona sobre tu historial pasado y sobre tu presente en este área.
4. Ayudar a tu hijo a sentirse A SALVO / confiado
Sé un trampolín y al mismo tiempo puerto seguro como madre o padres. Ofrece apoyo emocional incondicional. Prioriza la conexión y tu propio auto-control: se sentirán más seguros de explorar.
Estrategias:
a. Invierte en un fondo de confianza mutuo. NO se trata de hacer todo por ellos sino de responder a sus necesidades emocionales.
b. Enseña habilidades de gestión interna - mindfulness.
Reflexiona: que puedes hacer para que tu hijo se sienta seguro? Aceptarle? Tus expectativas? Enfoca en conectar con el paisaje interno de tu hijo, aunque te cueste.
En conclusión, el mindfulness nos ayuda a estar más presente con nuestros hijos al estar más presentes con nosotros mismos, con nuestras emociones, con nuestra comprensión de nuestra historia personal etc.
Eres buena madre
En esta entrevista me acompaña la consultora de crianzas intensas Bea Sánchez de la web Mamá Valiente. Bea es madre de 5 niños, incluido dos pares de mellizos, uno de ellos con altas capacidades y alta sensibilidad. Además, es autora de 3 libros sobre maternidad, expectativas y gestión de tiempo.
En esta entrevista me acompaña la consultora de crianzas intensas Bea Sánchez de la web Mamá Valiente. Bea es madre de 5 niños, incluido dos pares de mellizos, uno de ellos con altas capacidades y alta sensibilidad. Además, es autora de 3 libros sobre maternidad, expectativas y gestión de tiempo.
¡Escúchala aquí!
En esta conversación muy rica hablamos de: minimalismo en la crianza, las etiquetas de la neurodiversidad, la culpa de los padres, y el peso de las expectativas. Pero el hilo que une la conversación es la noción de que somos buenas madres para nuestros hijos, sean cuales sean las circunstancias.
Te dejo aquí los principales puntos de nuestra conversación:
1:16¿Por qué te dedicas a apoyar a los padres y a escribir sobre crianzas intensas?
4:16 Como ayuda el minimalismo en la crianza
8:53 “No es lo que tengas, sino lo que crees que puedes hacer con lo que tienes”
10:37 Los hijos con altas capacidades, alta demanda y doble excepcionalidad
15:35 Ir más allá del comportamiento
18:30 Etiquetas buenas y etiquetas malas
24:15 Como gestionar las expectativas
34:40 Como gestionar tu tiempo para poder conectar mejor con tus hijos
37:45 La culpa de los padres y su función positiva
50:46 La pirámide de prioridades en la familia
52:50 Autocuidado verdadero
55:25 Aceptación vs. Autoestima
57:00 Despedida y más información
Puedes seguir el trabajo de Bea en: www.mamavaliente.es
Instagram: https://www.instagram.com/soymamavaliente
“Menos expectativas, más felicidad: Como ser feliz sin esperar nada” https://www.amazon.es/Menos-expectativas-más-felicidad-esperar-ebook/dp/B07LG7RKMK/ref=sr_1_1?__mk_es_ES=ÅMÅŽÕÑ&dchild=1&keywords=bea+sanchez&qid=1601577951&sr=8-1
“Ni todo tú, ni todo hoy: Gestiona tu tiempo” https://www.amazon.es/Menos-expectativas-más-felicidad-esperar-ebook/dp/B07LG7RKMK/ref=sr_1_1?__mk_es_ES=ÅMÅŽÕÑ&dchild=1&keywords=bea+sanchez&qid=1601577951&sr=8-1
“Eres buena madre: la culpa, el estrés y el miedo en la maternidad” https://www.amazon.es/Eres-buena-madre-estrés-maternidad-ebook/dp/B08D11B1VL/ref=sr_1_3?__mk_es_ES=ÅMÅŽÕÑ&dchild=1&keywords=bea+sanchez&qid=1601577951&sr=8-3
¡Ayuda! Mis hijos me absorben
¿Te sientes absorbida por tus hijos? ¿Sientes que tu rol como madre (o padre) te quita todo tu tiempo y toda tu energía, incluso aunque tengas otras responsabilidades? Y que, además, cuando tu hijo tiene necesidades específicas o no se desarrolla como el resto de niños de su edad, ¿realmente no te queda vida mas allá de tu papel como madre?
¿Te sientes absorbida por tus hijos? ¿Sientes que tu rol como madre (o padre) te quita todo tu tiempo y toda tu energía, incluso aunque tengas otras responsabilidades? Y que, además, cuando tu hijo tiene necesidades específicas o no se desarrolla como el resto de niños de su edad, ¿realmente no te queda vida mas allá de tu papel como madre?
¿Prefieres escucharlo? ¡Escúchalo aquí!
Lo primero que quiero decirte es que, esto es normal, sobre todo cuando los hijos son pequeños o cuando sus necesidades son elevadas o muy diferentes.
Yo también soy madre de un hijo diferente y no te voy a negar que exige mucha dedicación, tiempo, y un continuo “estar pendiente”. Y que va mucho más allá de las exigencias intrínsecas de criar a un hijo neurotípico.
Entre la búsqueda y coordinación de terapias, lo logística de los cuidados y la intendencia en casa y fuera de casa, las batallas por recibir los servicios educativos adecuados para ellos, los temas médicos (si los hay), y el hecho de que muchas veces tenemos que ser nosotros los que les enseñemos a jugar o la policía casera de sus juegos repetitivos o estereotipados…
Por no hablar de nuestro propio bagaje, que también es específico a los padres de hijos diferentes: el duelo, la ansiedad, la falta de comprensión por parte de otras personas, el cansancio físico y mental, el enfado y la rabia por tu situación, el estrés, y un vivir continúo con emociones difíciles de gestionar.
El mensaje de este post es importante: no te sacrifiques por tus hijos. Ni les ayuda a ellos ni es saludable para ti. Y te puede llevar a una vida de sufrimiento que te cause problemas y desafíos médicos y psicológicos a largo plazo. O que simplemente te haga estar en modo supervivencia toda tu vida, sin disfrutar, y sin poder compartir verdaderamente tu esencia y tu amor con los tuyos.
Lo digo siempre, si tu no estás bien, tu hijo tampoco estará bien.
Entonces, ¿qué hacemos cuando nos sentimos absorbidas o desbordadas por nuestra maternidad de un hijo diferente? ¿Cómo podemos detener la marea que amenaza con tragarnos del todo? ¿Cómo evitar esa sensación que a veces nos embarga de que nos hemos vuelto unas desconocidas para nosotras mismas? Ese despertarnos por la mañana y sentir que somos una cáscara vacía, un automatón, que vivimos la vida de otra persona, que no nos reconocemos, que no conectamos con nuestra vida…
Lo primero es que no te sientas culpable ni fracasada. Es crucial dejar de machacarnos con pensamientos del tipo “soy una fracasada”, “soy una desgraciada”, “no lo he hecho bien”, “nunca voy a ser feliz”, ”nunca voy a poder remontar esto”, o “incluso ¿qué he hecho yo para merecer esto?” o ”mi vida va a ser siempre así”.
Un consejo práctico: cuando tengas pensamientos con las palabras nunca o siempre, ¡ojo! El uso de esas palabras son alarmas de que estamos dejando que una interpretación, un pensamiento concreto, dicte una evaluación global de algo. Los nunca y los siempre son exageraciones y nos ponen en modo víctima.
Ideas prácticas para ir modificando esa sensación permanente de que los hijos “nos absorben”
Darte cuenta de que te has tratado hasta ahora como una víctima, y deja de hacerlo
¿Cómo? No creyéndote todos los pensamientos que se te pasan por la cabeza, y entendiendo que hay 3 tipos de asuntos: los tuyos (sobre los que tienes poder - tus pensamientos, tus emociones, tus acciones y reacciones, y los factores externos sobre los que tienen algún nivel de control como por ejemplo a qué hora te vas a dormir o lo que comes). Los de otra persona (sus pensamientos, sus emociones, sus acciones y reacciones, sobre los que tú no tienes realmente control) y los factores externos que les afectan a ellos (sobre los que puedes tener algo de control, dependiendo de lo que sea). Y la tercera categoría es los asuntos de la vida, del mundo, de como lo quieras llamar. Son los asuntos sobre los que ni yo, ni tú, ni otra persona tenemos control.
Es el hecho de que tu hijo o hija es diferente, por ejemplo. Ahora te pregunto ¿El origen de tus pensamientos victimistas son sobre qué tipos de asuntos? También entiende que nos gusta quedarnos en la zona de confort, y aunque esto de ser una mamá sacrificada no parezca ser muy cómodo, a nuestro cerebro le vale porque es lo conocido.
Tomar decisiones para cambiar algo en nuestra vida supone, inevitablemente, asumir riesgos, cambiar cosas y a menudo esto nos echa para atrás. Entiende que esto es neurociencia, no es que tú seas una cobarde. Y anímate a probar pequeños pasos para cambiar tu día a día. Aquí te doy algunas ideas.
2. Conócete mejor
Re-establece la conexión contigo misma. Seguramente has cambiado mucho y ha cambiado mucho tu vida desde que fuiste madre o padre.
Cuando no sabes lo que te falta dentro, pues es difícil saber por donde tirar, aunque sientas que hay una especie de vacío interior. Necesitas darle significado a tu vida, a la TUYA, para poder vivir mas allá de tus roles, responsabilidades, obligaciones, tareas, etc. Esto lo tenemos que hacer con nosotras mismas primero, para volver a infundir significado a las relaciones en nuestra vida. Si somos un cascaron vacío, ¿cómo crees que vas a relacionarte con los demás, incluidos tus hijos?
Esto no lo puede hacer nadie por ti. No hay atajos. Hay que invertir algo de energía (en el sentido de intención) en volver a conocer tus gustos y tus prioridades. Ya pero y si luego no tengo tiempo de llevarlas a cabo? Vamos por pasos. Distingue entre lo que te gusta, lo que te llena, lo que te encanta…. De lo que, a nivel práctico, puedes hacer.
3. Re-organiza tu vida para darle ALGO de tiempo a tus prioridades.
Todos tenemos algunos momentos al día en los que no estamos con los hijos, o en los que los hijos están ocupados, etc.
A veces es tan sencillo como conectar con un solo hobby o actividad que te encanta y que puedes hacer en casa a ratos perdidos o incluso con tus hijos (como poner música y bailar, lo cual te ayuda además a reconectar con tu cuerpo; o colorear cuando ellos colorean; o disfrutar de un café a solas en silencio antes de que se despierten…).
Como siempre digo, no es la actividad en sí lo que importa, o cuanto tiempo tienes para realizarla, es el autoconocimiento y la intención de cuidar de ti, de darte un ‘capricho’, de hacer algo que te gusta A TI que supone una diferencia. Aunque parezca poca cosa, el mero hecho de darte algo a ti misma CADA DIA, y lo de que sea a diario es crucial, nos da el mensaje a nosotras mismas de que nuestro bienestar importa y nos ayuda a conocernos mejor.
4. Pide ayuda
Si, ya sé que nos cuesta mucho pedir ayuda. Pero es fundamental si no queremos sentir que lo tenemos que hacer todo nosotras. Y NO lo tenemos que hacer todo nosotras. Repito: NO lo tenemos que hacer todo nosotras.
Muchas veces sentimos que nuestra pareja no nos apoya. No tengo recetas mágicas para ti, salvo una: hay que sentarse juntos a hablar para llegar a acuerdos de convivencia. Comunica tus necesidades asertivamente, no desde la queja, sino desde la claridad de lo que TU necesitas. Y al mismo tiempo, escucha a tu pareja expresar lo que necesita también.
A partir de ahí podéis buscar soluciones que maximicen el bienestar global de la unidad familiar y el de cada uno. No digo que sea fácil, pero desafortunadamente el mayor desafío que tenemos en pareja es operar desde las expectativas. No esperes que tu pareja, o tu madre, o tu hermana lea tus pensamientos o necesidades. Lo de “si me quieres, me deberías entender” es una falacia.
Comunica tus necesidades claramente para darle a los demás oportunidad de satisfacerlas aunque sea parcialmente. No te expreses desde la queja sino desde el conocimiento y el respeto propio y ajeno.
5. Ni todo Tú, ni todo ahora
A menudo somos nuestro propio verdugo con el perfeccionismo - somos mamás multi-taskers que no paramos de exigirnos a todos los niveles (casa, comidas, hijos, pareja, profesión, amistades, etc.). Y que además nos auto-criticamos cuando efectivamente no llegamos a todo.
Mira, aquí hay que hacer un análisis profundo de las creencias que te llevan a estas exigencias. Te podrás quejar de los demás, de la cultura machista de tu país, de lo que te ha sucedido hasta ahora en la vida… pero lo cierto es que la que te exiges eres TÚ. Y la que tiene el poder de dejar de exigirse de esta manera también eres TÚ.
“Pero quiero que mis hijos lo tengan todo” ‘Todo’, como decía antes, es una palabra que nos incapacita, nos contrae y nos hace sentir culpables. En realidad, ¿qué quieres realmente para tus hijos? Hazte esta pregunta sin ansiedad, con curiosidad, como te la harías a ti misma. Yo lo que quiero es que mi hijo tenga alegría. Cuando hay alegría se lee que hay amor.
La mayoría de nosotros queremos que nuestros hijos, sobre todo cuando tienen diferencias de desarrollo, sean felices y estén bien y seguros. Eso, a día de hoy, depende en gran medida, de nosotros, sus padres. De nuestra propia felicidad, no de que tengamos todos una agenda ocupadísima.
Hay muchas cosas que quiero hacer con mi hijo y no hago. Algunas las haré. Otras se quedarán en una foto que vi en Internet. Entretanto quiero abrazar a la mujer angustiada que vive dentro de mí teniendo miedo de lo que falta. Y te digo lo que dice Bea Sanchez de mamá valiente:
«Lo que haces está bien y es bueno.
Tus hijos quieren una mamá tan descansada como para jugar,
tan blandita como para abrazar,
tan valiente como para ir sobre la marcha»
6. Integra gratitud y compasión en tu vida
Hacia los demás claro, pero sobre todo hacia ti mism@. ¿Cómo? Practicándolo de manera consciente. Hay que practicar estas emociones para fortalecer nuestro sentimiento de conexión con la vida. Nos llevan a una apertura y a una visión más global y completa de nuestra vida.
Tal vez no todo es como queramos y no lo vamos a poder cambiar, pero la gratitud nos hace reconocer lo positivo, y la compasión nos ayuda a ser más tolerantes con nosotros mismos y con los demás cuando no nos sintamos tan cómodos en una situación.
Un ejemplo sencillo de la práctica de la gratitud, que yo misma realizo, es dar las gracias por lo que sea cada noche en la cama. Puedes hacerlo por escrito (y poder así volver a ello cuando te sientas deprimido o bajo anímicamente). O puedes hacerlo en su versión vaga, como yo, que es mentalmente.
Así que, para resumir, aquí te he dado algunas ideas prácticas para ir modificando esa sensación permanente de que los hijos “nos absorben”. Son:
1. No te trates como a una víctima. Tienes más poder de decisión y actuación de lo que crees.
2. Conócete mejor. Esto no lo puede hacer nadie por ti. No hay atajos. Invierte en la única relación que vas a tener toda tu vida, la que tienes contigo misma.
3. Re-organiza tu vida para darle ALGO de tiempo a tus prioridades, aunque sean unos minutos al dia.
4. Pide ayuda. Comunica tus necesidades con asertividad y huye de las expectativas.
5. No te exijas tanto, y
6. Practica la compasión y la gratitud en tu vida.
Los hermanos de mi hijo diferente
¿Qué pasa cuándo tenemos otros hijos? Como padres, ¿cómo ayudamos a nuestro hijo típico a que entienda la diferencia de su hermano o hermana? ¿Debemos y cómo intervenir en la relación entre hermanos? ¿Qué hacemos con la culpa que sentimos si le damos más tiempo y atención a un hijo sobre otro u otros? ¿Si sentimos que nuestro hijo neurotípico está de alguna manera sufriendo o saliendo peor parado a nivel de disponibilidad nuestra por las exigencias en la crianza de su hermano/a?
¿Qué pasa cuando tenemos otros hijos? Como padres, ¿cómo ayudamos a nuestro hijo típico a que entienda la diferencia de su hermano o hermana? ¿Debemos y cómo intervenir en la relación entre hermanos? ¿Qué hacemos con la culpa que sentimos si le damos más tiempo y atención a un hijo sobre otro u otros? ¿Si sentimos que nuestro hijo neurotípico está de alguna manera sufriendo o saliendo peor parado a nivel de disponibilidad nuestra por las exigencias en la crianza de su hermano/a?
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Hoy te quiero hablar de hasta qué punto las familias somos ecosistemas y como una parte afecta al todo. Pero también de cómo no podemos responsabilizar a una parte (en este caso a nuestro hijo neurodiverso) de gran parte o incluso TODO lo que sucede en el seno de nuestro hogar.
En este sentido los padres tenemos de hecho la responsabilidad principal sobre cómo van las cosas en nuestra familia pues somos los adultos y a menudo las relaciones entre nuestros propios hijos (y con nosotros mismos) podrían mejorar sustancialmente con un mayor grado de gestión emocional, autoconocimiento y comunicación asertiva.
Vamos por partes. Primero me gustaría explorar el tema de la diferencia entre tus hijos y cómo esto puede afectar a la relación entre sí mismos y con vosotros. En la segunda parte del post te quiero hablar del sentimiento de culpa que podemos llegar a tener los padres cuando sentimos que damos más atención a un hijo que a otros.
Con respecto a la dinámica en casa:
La apertura y la comunicación.
Como padres, es conveniente hablar entre vosotros y decidir cuando puede ser un buen momento para contarle a vuestro hijo neurotipico el por qué de ciertos comportamientos, dificultades o diferencias de su hermano.
Te recuerdo que este es un tema complejo por depender mucho de las situaciones individuales de cada familia. Pero resumiendo: entiende tus necesidades al respecto, las de tu hijo neurotípico, busca el mejor momento, espera si no crees que esté preparado…Pregúntate: “¿Le va a ayudar o no saberlo en este momento?” Recuerda que la información es poder, pero esto incluye pasar más allá de una mera etiqueta.
Requiere enseñar a tu hij@ neurotipico a que empatize con y a que acepte a su hermano tal y como es, con sus habilidades y sus desafíos. Que comprenda que las dificultades que puedan tener en casa no son culpa de nadie sino que el cerebro de su hermano está “cableado” de manera diferente. Y a que le quiera a pesar de que sus diferencias le causen comportamientos que el hermano neurotipico ve como peligrosos, impredecibles, misteriosos o problemáticos.
Consejos prácticos que te pueden ayudar:
Explicar con palabras sencillas y acorde con la edad por qué su hermano necesita cuidados diferentes y/o más tiempo.
Estimular las conversaciones familiares donde cada cual puede hablar abiertamente de sus sentimientos, emociones, necesidades y preocupaciones, tanto propias como en la relación con los demás. Como padres en esto podemos colaborar de muchas maneras:
a) siendo modelo de autoconocimiento emocional (que siento, donde lo siento, que necesito, etc)
b) ayudando a canalizar emociones de manera funcional y saludable, nombrando y ampliando el vocabulario emocional, diferenciando la emoción de su expresión, sosteniendo las emociones de nuestros hijos y ayudándoles a expresarlas de manera apropiada sin hacer daño a los demás,
c) evitando avergonzar, comparar, culpar o manipular a los hijos con respecto a sus emociones “eres demasiado mayor para hacer eso”, “no deberías llorar”, “mira como estas asustando a tu hermana”, etc.
Hay varios estudios sobre los efectos positivos para un hijo de tener un hermano con necesidades específicas, que incluyen una mayor adaptabilidad, capacidad de empatía, y tolerancia hacia los demás. Pero también hay que estar atentos a posibles niveles elevados de ansiedad, depresión o dificultades con niños de su edad. Afortunadamente, cada vez hay menos estigmatización social respecto a tener un hermano neurodiverso o con necesidades específicas pero siempre hay que tener muy presente el entorno social y familiar del niño neurotipico.
Ahora me gustaría tratar de la espinosa cuestión de la culpa paterna o materna cuando sentimos que damos más atención a un hijo que a los otros.
Aquí te invito a que te preguntes: “quiero menos a mi hijo o hija neurotípico por dar más tiempo, atención o cuidados a mi hijo o hija con necesidades específicas?”
El bienestar de nuestros hijos es fundamental, pero las necesidades son diferentes. Tal vez sean difíciles de compaginar en ciertos momentos, pero no tienes por qué elegir SIEMPRE entre uno u otro.
Aunque a nivel de tiempo o enfoque parezca que sí, es totalmente posible (y de hecho conveniente) que hables con tu hijo neurotipico sobre tu amor incondicional por él y a que piensas en maneras de traducir este amor en tiempo y atención (más adelante te doy algunas ideas prácticas).
Pero antes también quiero decirte que es normal creer que la mejor manera de demostrar nuestro amor a los hijos es cuidando de ellos, pasando tiempo con ellos, haciendo cosas por o con ellos, prestándoles atención. Y, claro está, esto es una de las maneras de demostrar amor. Pero ni es la única ni es siquiera la más efectiva, por decirlo de alguna manera. También hacemos cosas con y por ellos por obligación.
Y como madres y padres a menudo confundimos cantidad y calidad. Déjame que te explique. Cuántas veces estás en la misma habitación que tu hijo neurotipico pero no le prestas atención de verdad, porque estás pensando en lo que hacer de cena o en que tienes que llamar a la logopeda? ¿O por qué te pierdes con estados emocionales de ansiedad o de preocupación por tu otro hijo?
Puedes pasar horas al lado de tu hijo y no conectar con él. Cuidar no siempre equivale a la presencia y atención que son la base del verdadero amor. Confundimos estar físicamente con presencia y atención, y no es lo mismo. Si nuestra mente o nuestras emociones están en otro lado, si quisiéramos estar haciendo otra cosa, entonces no estamos realmente con ellos.
El mejor regalo que le podemos dar a los demás es nuestra presencia, es decir, nuestro tiempo y atención, pero hay que reconocer de una vez por todas que no podemos dar algo que no tenemos. No puedes darle a tu hijo paciencia, escucha, generosidad, presencia y amor si no los tienes en ti y para contigo misma.
Por eso, la comunicación de necesidades e invertir algo de tiempo a la semana en tu propio cuidado (aunque sean minutos aquí y allá) es tan importante. Es asegurarnos de que nuestra fuente de amor está repleta para que pueda fluir hacia los demás, sobre todo cuando tus hijos tienen necesidades diferentes.
Ok, muy bonito. Pero qué hago en los momentos en los que las necesidades de cuidado de mi hijo diferente son de hecho incompatibles con el contexto o con las necesidades de mi hijo neurotipico?
Consejos prácticos que te pueden ayudar:
1. Como padre, turnarse para dedicar tiempo exclusivo a cada hijo para hacer una actividad que les guste mucho y que no puedan (o no sea conveniente) hacer todos juntos.
2. También al contrario, y dentro de lo posible, intentar realizar actividades, rutinas y juegos juntos haciendo las adaptaciones necesarias.
3. Reconocer las habilidades, esfuerzos y logros a todos por igual y dentro de su desarrollo individual.
4. Evitar, como padres, echar demasiadas responsabilidades sobre el hijo neurotipico: que no sienta que se tiene que “hacer cargo” del hermano o hermana diferente. Dejemos que los niños sean niños! No cargamos con expectativas adultas a nuestros hijos neurotipicos.
5. Recurrir a profesionales como terapeutas de ABA (análisis conductas), terapia ocupacional, psicólogos e incluso psiquiatras si hay patrones recurrentes de agresión física entre hermanos. Recordad, como padres, que todo comportamiento es comunicación y que en esas circunstancias hay que investigar por qué se dan estas agresiones.
Al final, el factor más fuerte que afecta la interpretación de un hijo sobre la discapacidad o diferencia de su hermano es la interpretación que hacen los padres. Aborda la diferencia de tu hijo con amor, aceptación y como algo con oportunidades y no solo desafíos para todos en la familia, y los otros niños en casa tendrán una perspectiva más positiva.
La importancia de la intervención temprana
En esta entrevista hablo con la psicóloga y terapeuta especialista en desarrollo infantil Katherina Echeverria sobre la importancia de la intervención temprana. Porque si hay algo en lo que todos los profesionales de la salud, padres, terapeutas y educadores están de acuerdo es que cuanto antes se apoye a los niños con diferencias neurológicas o de desarrollo, más posibilidades de éxito tendrán esas intervenciones.
En esta entrevista hablo con la psicóloga y terapeuta especialista en desarrollo infantil Katherina Echeverria sobre la importancia de la intervención temprana. Porque si hay algo en lo que todos los profesionales de la salud, padres, terapeutas y educadores están de acuerdo es que cuanto antes se apoye a los niños con diferencias neurológicas o de desarrollo, más posibilidades de éxito tendrán esas intervenciones.
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Este es un tema fundamental y en esta charla cubrimos por qué es crucial empezar con terapias, incluso antes de un diagnóstico. También hablamos del tipo de terapias y Katherina nos da recomendaciones para los padres, pues involucrarnos es clave para ver progreso en nuestros pequeños.
Te dejo aquí los principales puntos de nuestra conversación:
1:16 Presentación del trabajo y la experiencia de Katherina
2:45 ¿Qué es la intervención temprana?
6:45 Las terapias cuando hay necesidad, independientemente del diágnostico
9:15 Tipos de especificidades y edades en los niños
13:10 Los objetivos fundamentales de la intervención temprana
24:05 Principales diferencias entre los distintos modelos y terapias (ABA, Modelo de Denver, Floortime, etc.)
27:35 La mala prensa de la terapia ABA
40:15 Aprender jugando
45:10 Recomendaciones para padres: ¿cómo y dónde empezar?
50:03 ¿Mamá o terapeuta?
57:05 Despedida y más información
Puedes seguir el trabajo de Katherina en:
Instagram: https://www.instagram.com/katherina_aba_conductual
Para más información sobre su curso Modulo de Intervención Temprana, contacta en: early.aba.therapy@gmail.com
Mindfulness en la crianza
En esta entrevista hablo con la pedagoga y coach de mindfulness para familias Patricia Diaz-Caneja sobre cómo integrar de manera realista la práctica del mindfulness en la crianza cuando tenemos hijos diferentes. Sin perfeccionismo, ni auto-exigencias, sino usando las actividades rutinarias (y los momentos a veces muy difíciles) de criar a un hijo con necesidades especiales. Hablamos de las resistencias más comunes y de cómo superarlas para poder transformar la relación p/madre-hijo desde dentro.
En esta entrevista hablo con la pedagoga y coach de mindfulness para familias Patricia Diaz-Caneja sobre cómo integrar de manera realista la práctica del mindfulness en la crianza cuando tenemos hijos diferentes. Sin perfeccionismo, ni auto-exigencias, sino usando las actividades rutinarias (y los momentos a veces muy difíciles) de criar a un hijo con necesidades especiales. Hablamos de las resistencias más comunes y de cómo superarlas para poder transformar la relación p/madre-hijo desde dentro.
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Te dejo aquí los principales puntos de nuestra conversación:
1:41 Presentación del trabajo y la experiencia de Patricia
2:55 Meditación y mindfulness en el apoyo terapéutico a familias
5:55 El profesional acompaña pero la responsabilidad es de la familia
8:01 “El sujeto señalado” y cómo afecta a la autoestima de nuestro hij@ diferente
9:14 La frustración y la culpa de los padres
11:36 Darnos cuenta de lo que aportamos nosotros a la relación
17:50 Expectativas y normas sociales que nos pasan factura
19:07 Resistencias al mindfulness
27:48 No seas perfeccionista con el mindfulness
31:08 Como nos ayuda a estar más presentes con nuestros hijos
32:38 Empatía y perspectiva: todo es comunicación
40:48 Cómo responder con mindfulness ante comportamientos difíciles
45:50 Flexibilidad e higiene personal emocional
54:35 Despedida y más información
Puedes seguir el trabajo de Patricia en: www.diazcaneja.com y en:
Facebook: https://www.facebook.com/diazcanejaeducacion/
Instagram: https://www.instagram.com/patriciadiazcaneja/
YouTube: https://www.youtube.com/user/Patriciadiazcaneja
Además Patricia ha publicado dos libros de mindfulness para niños y familias “Un bosque tranquilo” y “El hada habla”: http://unbosquetranquilo.com
Puedes ver su charla TEDx “Aceptarse a uno mismo para aceptar a los demás”: https://youtu.be/nIRBVX-PWYs
Apoyos en las redes sociales
Preciosa e inspiradora charla con Damellys Regifo, creadora del proyecto Madres Azules de apoyo en redes sociales a familias con autismo y otras diferencias neurológicas
Preciosa e inspiradora charla con Damellys Regifo, creadora del proyecto Madres Azules de apoyo en redes sociales a familias con autismo y otras diferencias neurológicas
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Damellys vive en Venezuela y en esta entrevista hablamos de las grandes oportunidades de las redes sociales y los avances tecnológicos no solo para nuestros hijos (como estamos viendo actualmente durante la pandemia con la posibilidad de la teleterapia), sino sobre todo para las madres y los padres. Podemos entablar amistades y hacer crecer redes de apoyo online para no sentirnos tan solo o aislados. Y además podemos recabar información gratuita. Pero para sacar provecho del contenido en redes se necesita una actitud abierta, y haber trabajado la propia aceptación de nuestra situación.
Aquí tienes los puntos principales de nuestra conversación:
1:36 Presentación de Damellys y de su proyecto Madres Azules
2:43 Qué has aprendido en tu propio camino como madre de dos hijos con TEA.
7:30 Que factores te han ayudado con tu actitud y mentalidad
12:20 La importancia de no olvidarse de nuestro propio bienestar como madre o padre
16:56 Por qué, cómo y cuando creaste el proyecto de Madres Azules
21:00 Qué tipo de apoyo se ofrece a través de Madres Azules
27:25 El “regalo” de la pandemia: mayor servicios y conexión online
30:10 Qué pasa después del diagnóstico
33:44 La concienciación sobre y la visibilidad de las neurodiferencias
43: Aceptación vs. mejora de las especificidades de nuestros hijos
46:07 El duelo por la diferencia de nuestros hijos
47:17 Donde encontrar más información
Apoyos en la escuela
En esta entrevista me acompaña la psicóloga y técnico de educación especial Bea Diaz, especialista en TEA, sobre el apoyo escolar en las aulas para nuestros hijos con necesidades educativas diferentes o adicionales.
En esta entrevista me acompaña la psicóloga y técnico de educación especial Bea Diaz, especialista en TEA, sobre el apoyo escolar en las aulas para nuestros hijos con necesidades educativas diferentes o adicionales.
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Hablamos de los distintos tipos de modelos de apoyo dentro de las escuelas, de la falta de recursos, de las diferencias de curriculum, e incluso tocamos el tema de la reforma educativa, tan necesaria para crear una educación más inclusiva para todos. Además Bea nos da recomendaciones para que los padres tengamos una relación más constructiva con los profesionales de la educación.
Aquí tienes los puntos principales de nuestra conversación:
1:05 Presentación del trabajo de Bea
4:20 La terapia ABA
4:50 La terapia asistida con animales
7:36 Diferencias entre las terapias extra-escolares de apoyo
9:05 ¿Qué es un técnico de educación especial? ¿En qué consiste tu trabajo?
10:08 ¿Con qué tipos de especificidades del aprendizaje se trabaja en un colegio ordinario?
12:15 Modelos de apoyo a la educación especial en las aulas.
15:09 Falta de recursos públicos
17:20 Modelos combinados de apoyo
19:50 Diferencia entre técnico de educación especial, una terapeuta ocupacional y una logopeda
21:16 ¿El mismo curriculum o adaptado?
22:08 Limitaciones del apoyo escolar
23:35 Preparación en necesidades educativas especiales de los maestros en general
27:23 El problema de la continuidad en el apoyo de año a año
37:23 La reforma educativa
42:03 Los colegios de educación especial
45:05 Recomendaciones para los padres de cara al colegio
47:00 Dónde encontrar a Bea y más info sobre su trabajo
La sobre-protección a los hijos
En esta entrevista me acompaña la psicóloga Raquel Parra, especialista en intervención familiar y terapia sistémica, sobre un tema que nos atañe especialmente a los padres de hijos diferentes: la sobre-protección de nuestros hijos.
En esta entrevista me acompaña la psicóloga Raquel Parra, especialista en intervención familiar y terapia sistémica, sobre un tema que nos atañe especialmente a los padres de hijos diferentes: la sobre-protección de nuestros hijos.
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Es una conversación potente y llena de llamadas de atención para que entendamos las consecuencias negativas de los mensajes que damos a nuestros hijos al defenderlos y al hacer cosas por ellos en exceso. Consecuencias como la pasividad, la baja autoestima, e incluso la depresión. En específico, para los hijos con déficits sociales, hablamos sobre cómo fomentar la autonomía y los pasos para trabajar esto en nosotros mismos, los padres.
Aquí tienes los puntos principales de nuestra conversación:
1:18 Presentación del trabajo de Raquel
6:40 La importancia de trabajar cambios en la figura de referencia de la familia
8:25 Los enfocamos mucho en los problemas de los niños y nos olvidamos de los de los padres
11:40 ¿ Qué es la sobre-protección y que mensaje damos con ella a nuestros hijos?
17: 25 Sobre-protección a los hijos diferentes
24:36 ¿Qué necesidades cubrimos los padres cuando sobre-protegemos?
26:10 Cómo influye el sistema familiar
27:25 La diferencia del hijo como excusa de por vida para sobre-proteger
36:10 Si te das cuenta de esta tendencia en ti, investiga tu propia historia
39:10 Los hijos con problemas como mensajeros para ajustar todo el sistema
43:20 La sobre-protección como relación de dependencia mutua
44:20 Pasos para trabajar este tema
47:15 El coste de la sobre-protección: falta de auto-cuidado de los padres y falsas expectativas de los hijos
50:45 La disponibilidad emocional es más beneficiosa que la sobre-protección
52:30 Dónde encontrar a Raquel y más info sobre su trabajo
Qué es la terapia ocupacional
En esta entrevista me acompaña con Fabiana Martín, Terapeuta Ocupacional especializada en el apoyo a niños con necesidades especiales. Faby es una apasionada de su trabajo y, sobre todo, del acompañamiento y empoderamiento de los padres de los niños con los que trabaja.
En esta entrevista me acompaña Fabiana Martín, Terapeuta Ocupacional especializada en el apoyo a niños con necesidades especiales. Faby es una apasionada de su trabajo y, sobre todo, del acompañamiento y empoderamiento de los padres de los niños con los que trabaja.
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Es una conversación en la que hablamos sobre por qué la mayoría de niños con necesidades especiales necesitan terapia ocupacional, la importancia de la regulación sensorial (¡y hay más de los 5 sentidos que ya conoces!) y de entender las necesidades detrás del comportamiento de nuestros hijos.
Aquí tienes los puntos principales de nuestra conversación:
1:55 Apoyo a los padres: no te sientas culpable
2:55 Por qué Terapia Ocupacional y con qué tipo de niños se trabaja
4:27 Por qué la mayoría de niños con necesidades especiales o diferencias neurológicas necesitan terapia ocupacional
7:08 Juegos electrónicos vs. Juegos espontáneos y sociales
9:35 El juego grupal para el desarrollo de las habilidades sociales
15:21 Una sesión de terapia, ¿qué incluye?
20:16 Regulación sensorial y los 8 sentidos
28:45 Entender a los hijos: los comportamientos negativos son muy importantes
34:20 Por qué algunos niños aletean
37:14 Recomendaciones para los padres que buscan este tipo de terapia
45:45 Cómo usar las actividades corrientes de la casa de manera terapéutica
50:25 Dónde seguirle la pista a Fabiana